La historia de las croquetas se remonta a la época de la corte francesa de Luis XIV. Sí, las croquetas tal y como las conocemos hoy en día son originarias de Francia. Aunque no sabemos si en aquella primera ocasión, el cocinero de la corte las rellenó de carne o de pescado, sus múltiples combinaciones las convierten en un entrante excepcional en cualquier cocina.
Todos sabemos que esta receta de bechamel y pan rallado debe ser cremosa por dentro y bien crujiente por fuera. Su nombre la define a la perfección. Croqueta procede del término francés croquer, que significa «crujir». Por tanto, si una croqueta no cruje no puede considerarse según la auténtica receta.
Historia de las croquetas: el origen de la AUTÉNTICA receta
Otra de las facetas más interesantes de la historia de las croquetas, es la bechamel. La misma se cree que fue una copia de una receta italiana, pero quién la popularizó fue el cocinero Luis de Bèchamel en el siglo XVII. A partir de entonces, en 1817 fue Antonin Carême, cocinero de la corte del príncipe regente de Inglaterra, quién preparó las croquettes a la royale.
A lo largo de los años, las croquetas se han ido extendiendo y popularizando en países como Alemania, Países Bajos y España. Su preparación es tan extensa y variada que constituye uno de los platos más conocidos en casi cualquier gastronomía.
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Las croquetas pueden formar parte de una alimentación variada y equilibrada, siempre que no se abuse de ellas. Son un capricho del que puedes disfrutar una vez a la semana y acompañadas de comidas ligeras como purés, sopas frías y calientes, carnes blancas y pescados blancos a la plancha…
Entre sus componentes fundamentales se encuentran el pan, la leche y el huevo. Y a ellos se les puede añadir desde verdura, mariscos, pescados y carne. En función de sus componentes, las croquetas pueden aportarnos una cantidad variable de nutrientes y vitaminas, hidratos de carbono y fibra.
Desde Ramón restaurante te proponemos las croquetas en diferentes versiones. Principalmente de jamón o de bogavante, también las hemos preparado de rabo de toro o de bacalao. Siempre caseras y elaboradas con ingredientes de primerísima calidad, nuestras croquetas de jamón y las de bogavante son cremosas y ligeras. Representan uno de nuestros entrantes más populares y demandados por los comensales.
Si ya las has probado, sabes de lo que hablamos, y si no, ¿a qué esperas para hacerlo? Estamos seguros de que sus sabores no os defraudarán. Porque no hay nada más satisfactorio que disfrutar de una deliciosa croqueta casera.